Ciudad de México. México se ubica en la quinta posición en el avance de inteligencia artificial en comparación con otras naciones latinoamericanas, de acuerdo con una medición divulgada este viernes por la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
La inteligencia artificial bien utilizada puede ser un catalizador de productividad en el sector de servicios, logrando que sean tecnologías complementarias y no sustitutas”, dijo José Salazar, secretario ejecutivo del organismo dependiente de Naciones Unidas, durante la presentación del “Índice Latinoamericano de Inteligencia Artificial”.
El documento indica que en la región, la brecha del desarrollo de la inteligencia artificial “es sustancial” respecto a los países líderes a nivel global.
Entre 2010 y 2021, la inversión privada conjunta de todos los países de América Latina no superó el 1.7 por ciento del monto de la inversión de Estados Unidos o el 5 por ciento de China.
El análisis elaborado por el Centro Nacional de Inteligencia Artificial de Chile (Cenia) muestra que en una escala de 100 puntos, el avance promedio de la región es de 42.01, mientras que México se ubica en 48.55 puntos.
El país se encuentra por debajo de Chile con 72.67 puntos, Brasil con 65.31, Uruguay con 54.99 y Argentina con 54.76. Por debajo de México se encuentran Colombia, Perú, Costa Rica, Panamá, Ecuador y Bolivia.
La realidad de la inteligencia artificial en América Latina es tan diversa como los paisajes que visten el continente. Países con niveles de productividad científica tan altos como la cordillera pero con deficiencias en su transferencia tecnológica. Otros con disponibilidad y variedad de datos tan abundantes como especies en la Amazonía, pero con deficiencias tecnológicas para sacar partido de ellos. Así, los resultados indican que ningún país destaca transversalmente en todas las dimensiones consideradas”, indica el documento.
El estudio señala a México como un importante referente para la región en diferentes dimensiones, pues “exhibe un ecosistema maduro y sólido”.
La nación, dijo, muestra un buen desempeño en la investigación, pero es necesario fortalecer la infraestructura, formación profesional en inteligencia artificial e impulsar la innovación y desarrollo.
A nivel regional, la Cepal señaló que no existe una fuga masiva de cerebros, pues regresan a sus países para desarrollar la inteligencia artificial.
En el caso de México “la migración de talento se ve que no es un fenómeno crítico y se aprecia una disminución progresiva de la influencia extranjera en la disciplina, además, destaca la progresiva influencia de China como país de colaboración científica”, dijo.
Salazar comentó que en medio las crisis causadas por el covid, la inflación, las tasas de interés de los bancos centrales y la aceleración tecnológica, ha destacado “la inteligencia artificial como una nueva fuerza transformadora, con un rango de potenciales impactos tan amplios que no es exagerado decir que puede cambiar el curso en la historia de la humanidad”.
Indicó que muchos impactos serán positivos, otros potencialmente negativos o desafiantes, por lo que se requiere una reflexión, así como una visión estratégica y regulación ya que por sus múltiples aplicaciones, puede revolucionar diversos aspectos de la sociedad, como la salud y los negocios.
Subrayó que la inteligencia artificial puede ser benéfica en la economía de la región, porque el promedio de crecimiento de la economía latinoamericana ha sido “sumamente bajo en los últimos 10 años, 0.8 por ciento”.