FACTA NON VERBA

Por Víctor Flores

PVEM buscará ahora el control político, económico y territorial del estado en 2024.

Los sucesos del fin de semana han dado un viraje importante en la política estatal y reacomodado al Partido Verde, en una ruta que sería definitoria hacia el próximo proceso electoral.

El deceso del alcalde de Tulum, Marciano Dzul Camal y la toma de protesta de Renán Sánchez Tajonar, como líder estatal del Partido Verde Ecologista en Quintana Roo, así lo perfilan, dado que el diputado verde se fortalece rumbo a sus aspiraciones a la presidencia de Cozumel.

Cuando el suplente de Marciano Dzul, el actual tesorero de Tulum, Diego Castañón Trejo tome protesta como presidente municipal de este municipio, el Partido Verde se estará reposicionando como la principal fuerza política del norte del Estado.

El PVEM tendrá en su poder los municipios de Benito Juárez, Puerto Morelos y Tulum, y de la mano de Renán Sánchez Tajonar, actual líder del Congreso del Estado, irán por Cozumel.

Con ello Isla Mujeres donde la presidenta Atenea Gómez Ricalde, se ha declarado independiente y en Solidaridad donde Lili Campos Miranda, se mantiene aún en el PAN para buscar la reelección, se convertirán en dos piezas valiosas a disputarse entre el Partido Verde y Morena rumbo al próximo proceso electoral.

El empoderamiento del Partido Verde, será un factor determinante para negociar sus posiciones en las próximas elecciones y si no hay acuerdos podría ir solo  a la contienda, lo que constituye un rompimiento con Morena.

En menos de seis meses, Morena ha perdido toda su fuerza en la zona norte del Estado, la gobernadora morenista Mara Lezama se encamina a un complicado proceso electoral, si en sus planes está arrasar y ganar para Morena los 11 municipios de Quintana Roo.

El panorama político no es halagador para Morena y sí promisorio para el Partido Verde, quien ahora tendrá el poder para negociar todo el norte del estado, lo que para ellos es la “joya de la corona”.

Para nadie es un secreto que al PVEM solo le importan los municipios llamados “ricos”, los del norte del estado, aunque en Bacalar, José “Chepe” Contreras, quien se ha vestido de verde, también buscará la relección por este partido.

Benito Juárez, Solidaridad y Tulum, acaparan poco más del 50 por ciento del total del presupuesto de los 11 municipios del estado y el Partido Verde ya los tiene en su poder.

Ahora este partido va por el control territorial (zona de más votos), buscará ganar Cozumel y negociar en Solidaridad e Isla Mujeres, con lo cual daría el golpe letal a Morena.

En Isla Mujeres podría deshacerse del lastre que les representa el diputado Juan Carrillo Soberanis, y apuntalar a Atenea Gómez Ricalde quien ya renunció al PAN y es una figura suelta y bien posicionada en dicho municipio.

En Solidaridad podrían negociar con Lili Campos quien ya anunció va por la relección o bien abanderar a un “junior” bastante verde como lo es Carlos Joaquín Rejón, hijo del ex gobernador Carlos Joaquín González a quien tienen entre sus filas.

Y es que la toma de protesta de Renán Sánchez Tajonar, el fin de semana en Cozumel, como líder estatal del PVEM, fue una muestra de poder y de insolencia política, que evidenció que van con todo para posicionarse como el partido mayoritario en el 2024, mientras que en Morena “Duermen el sueño de los justos”.

Morena sin liderazgo en Quintana Roo.

Mientras el Partido Verde avanza, se posiciona y se abre brecha rumbo el futuro proceso electoral, en Morena se hace más evidente la falta de liderazgo político, su dirigente estatal, Johana Acosta Conrado, está totalmente desaparecida.

Johana Acosta es una desconocida en la zona norte de Quintana Roo, y muestra de ello es que no hay trabajo político rumbo a las elecciones del 2024, cuyo proceso inicia en septiembre próximo.

Desde su designación como dirigente estatal de Morena, se cuestionó a la presidenta municipal de Felipe Carrillo Puerto, Mari Hernández, de haber impuesto a su pareja, Johana Acosta, como líder de este partido, un acto que fue calificado como inmoral por el propio presidente Andrés Manuel López Obrador.

Ante al nulo trabajo de Johana Acosta, la gobernadora Mara Lezama, ha tenido que cargar como líder moral de Morena en la entidad.

Mara ha trabajado de la mano de la 4T, muy cercana al presidente, tiene todo el apoyo del mandatario nacional, ya es incluso referente del morenismo nacional, pero el trabajo partidista de Morena en Quintana Roo ha dejado mucho que desear y es evidente que la gobernadora tendrá que dar la cara y entrar a su rescate con miras a las elecciones del 2024.

Tras ganar las elecciones del año pasado, en alianza con el Partido Verde, Morena no ha construido nada y vive en un aletargamiento, producto de la incapacidad e inexperiencia que ha mostrado su novel lideresa, que aún vive de las mieles del triunfo de Morena en el pasado sin mirar hacia al futuro.

La aún morenista y senadora Marybel Villegas Canché, ha tenido más trabajo de campo que Johana Acosta, por lo que no se descarta que la gobernadora tenga que recurrir a la senadora para revitalizar a Morena, sobre todo en la zona norte donde el Partido Verde ha ganado un terreno que no piensa soltar, ni negociar.

Marybel Villegas, camina rumbo a la candidatura por la presidencia de Benito Juárez, y tiene claro que si no es por Morena, será por otro partido, por lo que se convierte en una opción real para Morena, aun así se tenga que sacrificar a la diputada Anahí González, quien carece de capital político y seguidores para dar la pelea al Partido Verde.

Morena perdió el rumbo en Quintana Roo desde el mismo día en que tres presidentas municipales, actuaron como el viejo PRI y recurrieron al nepotismo, para imponer a sus esposos en la dirigencia estatal de Morena.

Mari Hernández, presidenta de Felipe Carrillo Puerto, no solo impuso a su pareja Johana Acosta, como dirigente estatal de Morena, sino que también colocó a su hermano, David Hernández y esposo de Yensunni Martínez presidenta de Othón P. Blanco como secretario de organización, mientras que Juanita Alonso, presidenta de Cozumel impuso a su esposo Eduardo Basurto como secretario general.

Así Morena construyó en Quintana Roo un partido de familia, que nada ha hecho y que hoy evidencia el retroceso del partido.

Así se mueve el ajedrez político a menos de 6 meses que inicie el proceso electoral rumbo a las elecciones del 2024.

FACTA NON VERBA

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